LA LLEGADA DE LA LUZ Y LA EXPANSIÓN DEL ALMA
El Solsticio de Verano
En el solsticio de verano, el sol alcanza su máximo esplendor, regalándonos el día más largo del año. Es un momento sagrado, una celebración de la luz que vence a la oscuridad, un tiempo para abrirnos a la expansión, al crecimiento, a la plenitud.
La luz que se extiende en estos días es también una luz interna que despierta en nuestro corazón. Nos invita a iluminar aquello que estaba en sombra, a conectar con la energía vital que fluye en la naturaleza y en nuestro propio ser.
Este tiempo es propicio para nuevas relaciones, para sembrar intenciones, para expandir nuestra conciencia y abrazar el flujo de la vida con confianza. La luz que el sol derrama sobre la Tierra es un recordatorio de la luz divina que habita en nosotros, esa chispa eterna que nos conecta con todo.
Que este solsticio nos inspire a vivir con más claridad, con más amor y con el compromiso de ser faros de luz en el mundo.
Comentarios
Publicar un comentario