EL ESPÍRITU QUEBRANTADO

El Salmo 34:18,  nos dice que : cerca está el Señor de los quebrantados de corazón; y salva a los contritos de espíritu.Este versículo nos habla de cómo un espíritu quebrantado, aunque pueda quitarnos fuerzas, también nos lleva a la cercanía de Dios, quien es nuestro sanador.

Además, en Proverbios 18:14 se dice: El espíritu del hombre soporta su enfermedad, pero ¿quién podrá soportar al ánimo angustiado?. Este versículo subraya cómo el bienestar emocional tiene un impacto directo sobre nuestra capacidad de resistir las dificultades físicas y de la vida. Un espíritu quebrantado no solo afecta la salud emocional, sino que también puede restarnos la energía para enfrentar los retos diarios.

En Efesios 4:30, se nos habla sobre no entristecer al Espíritu Santo, sugiriendo que una actitud de quebranto o amargura puede afectar nuestra relación con Dios. Cuando nuestra alma está cargada de tristeza, desesperanza o amargura, nuestra capacidad de experimentar la plenitud del Espíritu de Dios se ve limitada. Esto también puede traducirse en una falta de fuerza emocional y espiritual.

Un espíritu quebrantado tiene efectos devastadores sobre nuestra energía, nuestra perspectiva de la vida y nuestra capacidad para vivir con propósito. La tristeza profunda, el dolor emocional no sanado o la angustia constante pueden robarnos la alegría, la paz y la fuerza que necesitamos para avanzar. En momentos de angustia, podemos sentir que nuestra energía se agota, como si nuestra fuerza interior fuera drenada.

La buena noticia es que Dios no nos deja en nuestros momentos de quebranto.  El Señor está cerca de los que tienen el corazón roto, y Él nos da la fuerza necesaria para sanar y levantarnos. La restauración del corazón quebrantado es una de las promesas que Dios ofrece a aquellos que buscan Su consuelo y sanación.

Por ejemplo, en Isaías 61:1, que también es citado por Jesús en Lucas 4:18, encontramos que uno de los propósitos del Mesías es: "El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón." Esto es un recordatorio de que, aunque el espíritu quebrantado puede quitar nuestras fuerzas, Dios nos ofrece la restauración y la renovación.

Es interesante notar cómo, cuando estamos quebrantados, a menudo perdemos nuestra capacidad de ser agradecidos. Sin embargo, la gratitud tiene el poder de transformar nuestro espíritu. Como mencionábamos en Proverbios 17:22, un corazón alegre, que puede ser cultivado por un espíritu agradecido, es "buena medicina". La gratitud nos permite enfocar nuestra mente en lo que tenemos en lugar de lo que nos falta, y aunque no siempre elimine el dolor, tiene el poder de sanar nuestra perspectiva y restaurar nuestra fuerza.

Cuando nuestro corazón está lleno de tristeza o desesperanza, nuestra energía física y espiritual se ve afectada. Sin embargo, el consuelo divino, la cercanía de Dios y la restauración a través de la gratitud y el gozo en Él son claves para sanar nuestro corazón y recuperar nuestra fuerza. Aunque el quebranto puede ser una parte inevitable de la experiencia humana, la promesa es que no estamos solos en esos momentos. Dios, en Su infinita misericordia, está cerca de los quebrantados de corazón, dispuesto a restaurar nuestra fuerza y a renovar nuestro espíritu.

Con cariño,
✨ Ladiosaquetehabita ✨

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